Más de 1 millón 400 mil niños estudian y trabajan en el Perú:

En el Día mundial contra el trabajo infantil, la Fundación Telefónica destaca que el acceso a la educación puede superar la pobreza, los más de los 2 millones de niños y adolescentes que trabajan en nuestro Perú pueden adquirir mediante la formación escolar las habilidades necesarias para que de adultos tengan más oportunidades laborales y mejor remuneradas, así mejorar su calidad de vida.

Este es el balance en Loreto, sobre este problema: En Loreto , más de 97,000 se dedican a actividades económicas, muchos de ellos no son remuneradas.Además, aproximadamente 619,5 mil menores entre 5 y 17 años dejan la escuela por trabajar. Yel 73,4% de los niños que realizan actividad económica no recibe remuneración por su trabajo. El trabajo infantil vulnera los derechos fundamentales de los niños. Uno de los principales es el derecho a la educación, porque incentiva la deserción y el atraso.

Se estima que los niños que trabajan repiten en promedio tres años en la escuela en comparación con los que no trabajan.La Fundación Telefónica promueve la educación de calidad en los escolares como principal herramienta para combatir el trabajo infantil y romper con el círculo de la pobreza.

«Los niños deben estudiar no trabajar. El 76,5% de niños trabajadores no tienen sus estudios escolares completos, cuando la educación es la principal herramienta para luchar contra el trabajo infantil y la pobreza, porque el niño amplía su visión de vida social y económica, y con los conocimientos que adquiere en la escuela puede superarse», opinó la directora de la Fundación Telefónica, Elizabeth Galdo.

Más educación, mayores ingresos En el país, 73,7% de los niños trabajadores no recibe remuneración por su actividad económica, porque en su mayoría lo realizan en el negocio familiar. Por ello, la directora de la Fundación Telefónica recomendó a los padres de familia priorizar la educación en sus hijos en vez del trabajo. «Si un niño termina su colegio ganará siete veces más que el ingreso mensual de un adulto en extrema pobreza, y 15 veces más si completa la educación superior. A más nivel educativo, mayor serán los ingresos», aseguró. Galdo añadió que los vínculos afectivos en el entorno del niño que trabaja contribuyen, también, a que alcance una carrera profesional.

«La orientación de un adulto, sea sus padres o maestros, puede brindar un soporte emocional y social que permita al niño tener una trayectoria educativa y lo proyecte hacia un futuro promisorio libre de pobreza. Estos vínculos afectivos son fundamentales para fortalecer la autoestima, la voluntad y la disciplina», dijo. A su vez, un informe del Banco Mundial determina que un año adicional de escolaridad secundaria para los niños aumentaría su salario en el futuro en 10% a 20%. Zonas rurales La tasa de trabajo infantil en el Perú se intensifica cuatro veces más en las zonas rurales que en las urbanas. El 53,7% de niños en extrema pobreza se dedican a laborar.

El agro, la pesca y la minería son las principales actividades, seguido de los sectores de servicio y comercio. Para promover la igualdad de oportunidades entre los niños, la Fundación Telefónica impulsa hace más de 23 años la educación con tecnología en escuelas, hospitales y albergues de zonas urbanas, rurales y entornos vulnerables. «Mediante la tecnología, garantizamos que los menores accedan a una educación de calidad independientemente del entorno donde estén», informó Galdo. Desde el año pasado, la Fundación Telefónica desarrolla en el Perú uno de los proyectos de «Educación Digital» más grande del mundo que – a finales de este año – beneficiará a más de 815 mil alumnos, quienes con recursos tecnológicos y educativos elevarán su aprendizaje en diversas materias escolares y adquirirán capacidades digitales que les exigirá la futura demanda laboral.