Lucas Eleuterio denuncia desalojo arbitrario
Lucas Eleuterio Bartolo Ruiz, se apersonó a nuestro medio de prensa para denunciar el desalojo arbitrario de su lote de terreno por parte de una mujer que de la nada apareció con policías y otras personas para despojarle de su propiedad donde vivía por más de 4 años. El hecho ocurrió en el predio de la Mz. B, Lote 13 del asentamiento humano San Lorenzo, en el caserío del mismo nombre del distrito de Yarinacocha, cuyo predio fue adjudicado por las autoridades del sector mediante una asamblea general, donde se le expidió su Certificado de Morador para posesionarse del terreno. Luego de que Bartolo Ruíz construyera una pequeña vivienda al interior del lote, así como realizar algunas mejoras con madera, calaminas, entre otros, sorpresivamente el 14 de diciembre del 2019, fue desalojado por un grupo de personas al mando de la señora Flor de María Cárdenas Chujutalli, valiéndose de una Constancia de Posesión emitida por la Municipalidad Distrital de Yarinacocha, firmada por la Sub Gerencia de Planeamiento Urbano y Rural con la rúbrica de la Arq. Sheika Benzaquén Vargas. Según la denuncia del agraviado, a Flor Cárdenas se le adjudicó el lote número 2, pero él estaba posesionado del lote número 13, conforme se puede apreciar en el Plano de Lotización firmada por el Ing. Marco Antonio Aliaga Chávez y que no entiende cómo es que la denunciada con el abuso de poder lo haya despojado de su predio, sin ser el lote que le corresponde. “He puesto mi denuncia ante la fiscalía y hasta ahora no tengo ninguna respuesta. Existe una mafia de traficantes de tierra dentro de la municipalidad distrital de Yarinacocha e incluso se prestan para emitir documentos posesorios a personas que nunca han vivido en un lugar”, denunció Lucas Bartolo. “Quiero que se haga justicia, que no hagan abuso de autoridad por estar en altos cargos van a hacer lo que quieren con los documentos. Soy una persona de condición humilde, siento un abuso por parte de las autoridades, la constitución dice que nadie puede violar un domicilio”, culminó. J.Castillo