Sujeto confesó que secuestró, golpeó y abusó sexualmente de una niña de 3 años

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Juan Antonio Enríquez García (48), es el sujeto apodado como el «monstruo de Chiclayo», que secuestró a una niña de 3 años y la llevó hasta una vivienda a bordo de una minivan de color celeste de placa de rodaje BYM-238, dónde la golpeó y abusó sexualmente de ella.

La tarde del martes 12 de abril, el depravado aprovechó la distracción de los padres de la menor para llamar su atención y subirla al auto que conducía y luego llevarla hasta la vivienda ubicada en la urbanización El Santuario de Chiclayo, donde cometió toda clase de abuso en contra la menor hasta dejarla inconsciente.

Los padres al no poder encontrar a su hija, pidieron ayuda a la policía y enviaron mensajes a través de las redes sociales, lo cual movilizó a toda la ciudad en la búsqueda de la pequeña. Asimismo, mediante las cámaras de seguridad ciudadana lograron captar el momento en que el individuo cargó y se llevó a la menor en su vehículo azul con rumbo desconocido.

 “Por favor ayúdenme a difundir, mi hija ha desaparecido, no la encuentro, por favor difundan en la televisión, ayúdenme a publicarlo. Mi hija se la llevó un carro azul, acá en toda la avenida Lora, por favor se los ruego”, dijo desesperada la madre en el audio que se viralizó en redes sociales.

En horas de la mañana del día miércoles 13 de abril, efectivos de la División de Investigación Criminal (Divincri) hallaron el vehículo de placa BYM-238 e intervinieron a Enríquez García, quien sin remordimiento confesó que había secuestrado a la menor y la mantenía en el segundo piso de su domicilio.

Entonces el contingente policial llegó hasta la vivienda y halló a la menor en medio de una terrible escena: se encontraba inconsciente sobre unos cartones, atada de pies y manos con cinta de embalaje.

Casi de inmediato, personal de la policía femenina levantó a la niña y la envolvió en un cobertor para trasladarla hasta el Hospital Las Mercedes, donde la doctora Sandra Castillo diagnosticó que la menor se encontraba estable, pero con deshidratación.

Los padres llegaron al nosocomio y acompañaron a su hija hasta el Instituto de Medicina Legal (IML), donde tras ser evaluada se confirmó que había sido víctima de violación sexual.

 “Quiero que el violador se muera, que lo maten adentro, porque no tuvo piedad con mi hija, no tuvo piedad, es un daño enorme que le ha hecho”, dijo llorando el padre de la menor.

Familiares y toda la población de la ciudad de Chiclayo salieron a las calles exigiendo justicia para la menor, a quien le causaron un daño irreparable.

 

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