Denuncian a Jueza de Familia de Yarinacocha

Jessenia Tafur Ríos, magistrada del Juzgado de Familia Permanente de Yarinacocha, ha sido objeto de una queja presentada ante la Autoridad Nacional de Control (ANC) del Poder Judicial. La denuncia, realizada por Godofredo Sánchez Cubas, acusa a la jueza de falta grave, flagrante inconducta funcional, infracción a los deberes funcionales, manifiesta parcialización con la parte influyente, negligencia inexcusable, y la inobservancia de la norma procesal en su desempeño en el Expediente Nº 00379-2022-0-2402-JR-FC-0. Dicho expediente corresponde a la demanda de Variación de Tenencia interpuesta por Sánchez Cubas contra Lila Lourdes Minguillo Chepe.

La queja argumenta que la sentencia emitida por la jueza Tafur Ríos, a través de la Resolución N.º Veintisiete, ha sido resuelta de manera abusiva y parcializada a favor de la parte demandada. La acusación sostiene que la magistrada declaró Infundada la demanda de Variación de Tenencia, estableciendo un Régimen de Visitas ya contemplado en un Acta de Conciliación previa. Esta acción, según Sánchez Cubas, desvió la pretensión original de la demanda, generando indefensión y vulnerando el derecho a la tutela judicial.

En el corazón de la queja se encuentra la afirmación de que la juez Tafur Ríos ha otorgado credibilidad a los argumentos de la demandada sin un análisis riguroso, evidenciando parcialidad. Se destaca el Numeral 6.6 de la sentencia, donde se cita la versión de Minguillo Chepe sin cuestionamiento alguno, lo que según Sánchez Cubas demuestra una clara parcialidad al aceptar sin más la versión de la demandada y tergiversar la realidad de los hechos.

La denuncia subraya que la jueza Tafur Ríos repite una defensa contundente de la parte demandada en todos los considerandos de la sentencia, acusando al demandante de actos no comprobados y acciones conflictivas. Además, se argumenta que la jueza utiliza un lenguaje que demuestra violencia de género y misandria al cuestionar el actuar del demandante como padre, basándose únicamente en su condición de hombre.

Godofredo Sánchez Cubas concluye afirmando que la magistrada ha demostrado misandria en todos los aspectos de la sentencia, cuestionando su figura de hombre y padre, limitándolo y denigrándolo al acusarlo constantemente de «abandonar» a sus hijos. La queja sostiene que la jueza se ha parcializado completamente a favor de la demandada, perpetuando la discriminación por roles de género y vulnerando el principio de imparcialidad que se espera de todo magistrado al resolver una causa. (A. Segovia).

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