Más del 60 % de la población infantil no ha sido inmunizada en Ucayali

DEFENSORÍA DEL PUEBLO ADVIERTE INEFICIENCIA EN EJECUCIÓN DEL PLAN NACIONAL DE VACUNACIÓN

Es preocupante el último informe de la oficina de la Defensoría del Pueblo en Ucayali, ya que se ha descubierto que más del 60 % de la población infantil de la región no ha sido inmunizada contra poliomielitis, difteria, tos convulsiva, meningitis y neumonía, entre los años 2015 y 2020, lo cual pone en riesgo a los niños entre 0 y 4 años porque se encontrarían en riesgo de contraer múltiples enfermedades, al no haber recibido las vacunas correspondientes.

Por ello, la oficina defensorial demandó a la Dirección Regional de Salud (Diresa) cumplir en su integridad el Plan Nacional de Vacunación establecido por el Ministerio de Salud (Minsa), garantizando toda la logística y planificación para su debida implementación y ejecución.

COBERTURA DE VACUNACIÓN DESCENDIÓ ENTRE 2015 AL 2020

Tras el fallecimiento de una niña de 5 años que vivía en Pucallpa diagnosticada con difteria en octubre pasado, la institución solicitó a la Diresa información estadística de la cobertura y cumplimiento de metas de vacunación de niñas y niños entre 0 y 4 años en Ucayali, en el periodo 2015-2020. Sin embargo, la información por la mencionada entidad fue remitida incompleta, motivo por el cual se analizaron las cifras de la página web del Minsa, advirtiéndose un serio incumplimiento de las metas establecidas por ley en esta materia.

Según el reporte del Minsa, la cobertura de vacunación en Ucayali en el año 2015 alcanzó el 79,3 %; sin embargo, en el 2016 descendió a 49,3 %; en el 2017 hubo un ligero incremento a 54,4 % y en el 2018 volvió a descender al 50.7 %. El año 2019, la inmunización siguió descendiendo hasta llegar al 41,6 % y finalmente en el año 2020 apenas se alcanzó el 33.2 %. Asimismo, no se registra ningún niño con vacuna contra la poliomielitis en los años 2015 y 2016 y tampoco ninguno con la vacuna contra la varicela en los años 2015, 2016 y 2017.

VACUNAS NO FUERON UTILIZADAS AL 100%

Por otro lado, las estadísticas evidencian que, en el año 2015, de 8818 vacunas contra la poliomielitis solo se administraron 3363, y de la influenza, de un total de 8607 vacunas solo se completaron 3366. En 2016 se programaron 13 127 vacunas contra la difteria, papera y tétanos (DPT2), alcanzándose solo 4222; igualmente en la vacuna contra la poliomielitis (APO1), de 13 272, dosis solo se aplicaron 4443, es decir menos de la tercera parte. En el año 2017 la situación fue similar: de 13 127 vacunas contra la poliomielitis (APO2) solo se aplicaron 3572, y en el 2018, de 14 160 vacunas contra la varicela, solo se administraron 4222, en tanto que de 13 272 vacunas contra la poliomielitis solo se aplicaron 4447.

En el año 2019 las deficiencias continuaron, pues de 14 510 vacunas de influenza, solo 3170 llegaron a los beneficiarios, y en vacunas contra la poliomielitis, de 14 574, apenas se dispusieron 3658. Finalmente, en el año 2020 la pandemia agudizó la problemática y de 12 599 vacunas contra la fiebre amarilla (AMA) solo se aplicaron 2263 y de 10 798 vacunas de influenza solo se administraron 1971.

De la información antes descrita, se advierte que los establecimientos de salud no cumplieron las metas programadas, deficiencia que no solo es atribuible a la pandemia por el COVID-19, que provocó la desatención de otras patologías, así como el control normal de crecimiento y desarrollo del niño en el presente año; es además un problema que viene arrastrándose ya desde hace años atrás.

POBLACIÓN INFANTIL CON ALTO RIESGO DE CONTRAER ENFERMEDADES

Ante la situación, la oficina de la Defensoría del Pueblo en Ucayali manifestó su preocupación debido a que, en el presente año, hasta la fecha, más del 60 % de la población infantil programada no habría sido vacunada, afectándose su derecho a la salud e integridad, al someterla a un alto riesgo de contraer alguna infección prevenible con las vacunas administradas oportunamente.

«Es un contexto extremadamente inquietante, que significa una clara deficiencia en la implementación de la estrategia de vacunación de la Diresa, la misma que afecta gravemente el desarrollo integral de niños y niñas en nuestra región, quienes se encuentran en alto riesgo de contraer enfermedades, como la tuberculosis, hepatitis B, difteria, poliomielitis, tétanos, tos convulsiva, meningitis, neumonía, sarampión, rubéola, paperas, varicela, fiebre amarilla e influenza”, indicó Hugo Pari, jefe de la oficina de la Defensoría del Pueblo en Ucayali.

DIRESA DEBE CUMPLIR CON INMUNIZACIÓN A MÁS DEL 95%

Ante esta situación, la oficina de la Defensoría del Pueblo en Ucayali instó a la Diresa de dicha región, a cumplir responsablemente con el calendario de vacunación, reevaluar el plan regional de inmunización, a fin de superar las brechas, implementar un programa integral de control y vigilancia oportuna y recodar que, según el estándar establecido a través de las recomendaciones citadas por la NTS Nº 080-MINSA/DGSP, se debe cumplir con el 95 % a más de las metas físicas de inmunización.

También se requirió elaborar protocolos de emergencia para una rápida respuesta ante brotes infecciosos, realizar acciones prioritarias e intensivas para identificar zonas con mayor número de niños no vacunados en la región, a fin de iniciar acciones inmediatas de vacunación, y planificar adecuadamente el abastecimiento de la vacuna. Se recomendó, igualmente, asegurar el control efectivo de la calidad de las vacunas, y gestionar equipos con mayor capacidad de almacenamiento de vacunas para ser distribuidas en los establecimientos de salud y así evitar el desabastecimiento.

Finalmente, teniendo en cuenta la Jornada Nacional de Vacunación prevista para este 12 y 13 de diciembre, la institución recomendó a la ciudadanía acudir en forma ordenada, respetando el distanciamiento físico y el uso correcto de mascarillas. Del mismo modo, demandó a las autoridades del sector salud mejorar la estrategia y coordinaciones con las instituciones de apoyo, así como incrementar la cantidad de vacunas y de personal de salud para atender a toda la población, garantizando que se cumplan los protocolos de bioseguridad.