Senasa resguarda producción apícola

Como parte de las estrategias para proteger la producción apícola, el Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego, a través del Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa), realiza el monitoreo y tratamiento de la Varroosis en colmenas seleccionadas de 22 regiones del país, en beneficio de más de 1,250 apicultores peruanos.

Estas acciones se realizan con la finalidad de reducir los porcentajes de infestación del ácaro Varroa destructor, que disminuye la población de abejas y causa un impacto negativo en la actividad apícola.

 

Las tres principales actividades que ejecuta el Senasa en atención de esta enfermedad son el diagnóstico inicial del nivel de infestación, aplicaciones (con un producto orgánico) para el tratamiento de las colonias y capacitaciones dirigidas a los apicultores.

Los productores apícolas beneficiados con estas acciones estratégicas se encuentran en las regiones de Tumbes, Piura, Amazonas, San Martin, Ucayali, Cajamarca, Lambayeque, Áncash, La Libertad, Huánuco, Huancavelica, Lima, Pasco, Junín, Ica, Ayacucho, Apurímac, Cusco, Puno, Arequipa, Moquegua y Tacna.

Varroosis

Es una enfermedad de la abejas (Apis mellífera), causada por el ácaro Varroa destructor. Su acción parasitaria consiste en la alimentación de los cuerpos grasos de larvas y abejas adultas, preferiblemente los machos (zánganos) por su mayor tamaño, causando pérdidas importantes en las colonias de abejas, y con ello en la producción de miel, dado que es un transmisor de varios virus.

Tratamiento orgánico

Se realiza a base de Timol (producto natural extraído de la planta aromática tomillo) en cada apiario, previa evaluación y según la incidencia del ácaro en las colmenas evaluadas.

La actividad se ejecuta en dos fases durante el primer y segundo semestre del año. En cada apiario evaluado, mediante el piso trampa y que tenga un promedio de varroa caída mayor a tres ácaros, se realizarán dos tratamientos. El primero a las 24 horas de la evaluación y el segundo a los 8 días.

El Timol es un aceite esencial en forma de cristal, considerado además como antifúngico y antibacterial, el cual cumple con las exigencias para el control del ácaro y es de fácil aplicación, buena eficacia, seguro para las abejas y las personas, porque no afecta las características organolépticas de la miel ni deja residuos en la miel y la cera.

No se consideran para el tratamiento con timol aquellos apiarios en los que se realizó un tratamiento previo con productos químicos en seis meses de antigüedad. (FIN) NDP/NJC JRA

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