CASO SAWETO SE TAMBALEA
Perito revela falsedad en declaración clave de testigo protegido
CASO SAWETO
SE TAMBALEA
Un giro inesperado sacude el emblemático caso Saweto. Durante la audiencia de apelación realizada ayer, se reveló que la declaración del testigo protegido utilizada como principal prueba para condenar a los acusados sería fraudulenta. Esta revelación, sostenida por un peritaje documentoscópico, pone en jaque toda la estructura de la sentencia y deja serias interrogantes sobre la legalidad del proceso.
A la audiencia se presentaron dos testigos cruciales: el ex fiscal Otoniel Jara Córdova y el perito Jorge Vera Valcárcel. El primero admitió haber recibido la declaración del testigo protegido cuando el caso Saweto ya se encontraba en etapa de acusación. Sin embargo, aseguró haber incorporado dicha declaración en otra carpeta fiscal, la N.º 2019-60, relacionada a una investigación preliminar por crimen organizado contra los mismos imputados. Esta declaración se habría hecho sin notificación a las partes procesales ni disposición fiscal previa, y fue lacrada en un sobre entregado posteriormente al fiscal Michel Vega Sotelo.
Jara reconoció su firma y sello en el documento que consta en el expediente como la declaración del testigo protegido, a folios 110 de la carpeta fiscal 60-2019. No obstante, el peritaje realizado por el perito Vera Valcárcel arrojó conclusiones contundentes: tanto la firma del ex fiscal como la del testigo protegido habrían sido insertadas digitalmente en un archivo PDF, lo que convierte el documento en un material fraudulento.
Entre los hallazgos del peritaje documentoscópico destacan: Las firmas insertadas no provienen de los supuestos titulares, sino que fueron digitalmente añadidas.
El documento analizado digitalmente y el que obra físicamente en la carpeta fiscal son el mismo, con capas digitales superpuestas que evidencian manipulación.
El documento es inconsistente con los parámetros que garantizan la autenticidad y fiabilidad de una declaración judicial.
El perito sostuvo que una pericia grafotécnica no sería idónea para determinar la autenticidad del documento, dado que podría confundir la procedencia gráfica de una firma con su legitimidad. Explicó que la técnica grafotécnica, al basarse en el trazo y forma de la firma, podría avalar erróneamente una firma copiada digitalmente.
Este nuevo escenario deja en silencio a las organizaciones y medios que respaldaron abiertamente la sentencia en el caso Saweto. ONG ambientalistas como Pro Purús, Rainforest Foundation, AIDESEP, IDL, SPDA, y medios como Ojo Público, Convoca o Mongabay no se han pronunciado hasta el cierre de esta nota, pese a la gravedad de los hechos expuestos en la audiencia.
Durante la exposición del perito, los abogados de las víctimas –en su mayoría representantes del IDL– no formularon ninguna pregunta ni objeción, lo que ha generado suspicacias en la opinión pública.
Asimismo, el ex fiscal Jara habría mantenido vínculos con el caso incluso después de su retiro del Ministerio Público. Según lo manifestado en audiencia, habría sugerido la existencia de esta declaración en otra carpeta para ser usada en el caso Saweto, lo que refuerza la hipótesis de una coordinación irregular para validar la prueba hoy cuestionada.
En este contexto, la actuación del perito Vera Valcárcel cobra un peso determinante: su análisis ha puesto en duda la principal prueba que sustentó la condena y abre la posibilidad de una nulidad de la sentencia o absolución de los sentenciados, al haberse utilizado una prueba ilícita como base de la decisión judicial.
La Autoridad Nacional de Control asistió a la primera audiencia, pero no estuvo presente en esta segunda fecha clave. Se espera que en las siguientes sesiones continúe la vigilancia del caso por tratarse de un proceso de alto impacto público. Por su parte, la Junta Nacional de Justicia ya solicitó informes sobre el caso tras una queja contra los jueces de primera instancia, y la magistrada Ana Karina Bedoya Maque ha sido sancionada por demoras en la emisión de la sentencia. J.Castillo

